En nuestra comuna existen asociaciones de todo índole, pero en contadas ocasiones tenemos el gusto de poder conocer a un grupo de personas que esté dispuesto a ayudar y apoyar en el dolor ajeno de perder a un ser querido. Esto es lo que hace una agrupación de padres en proceso en duelo, que se denomina “Crecer juntos en el dolor”. Andrés Chavarría, monitor y encargado de esta junta, quiso abrirse a la comunidad y mostrar qué es lo que hace esta agrupación que ya lleva 3 años en la comuna de La Unión. Este sábado se reunieron para dar inicio a las actividades del año 2011, con una misa llevada a cabo en la parroquia San José de nuestra comuna.
20 personas de nuestra zona son las que se congregan mensualmente y que participan activamente de esta comunidad, aunque los inscritos son más de 50.
“Los que hemos pasado el proceso de perder a un hijo, sabemos que es algo que cuesta mucho superar. Inicialmente a mí me sucedió y en ese momento recibí el apoyo de esta congregación que está a lo largo de todo Chile. Yo recibí ayuda de ellos y así nació la idea aquí en La Unión, de poder juntarme con mamás o papás que han tenido el dolor de haber perdido un hijo y nos proyectamos para formar esta agrupación, que a la fecha ya llevamos 3 años funcionando y esperamos seguir.”
-¿Qué tipo de ayuda ofrece esta agrupación a los papás?
Esto parte desde nuestras propias experiencias, de los que actuamos como monitores y como personas que sí han podido superar este dolor, para así apoyar a los que están recién iniciándose o que se han quedado “pegados” en el duelo, que tiene que hacerse en forma natural y que no quede como algo patológico.
Especialmente yo, estoy recibiendo una continua capacitación en Santiago, con un sicólogo que se especializó en el extranjero en el tema de duelos de padres que han perdido hijos. Él está constantemente haciendo talleres donde nosotros vamos atendiendo los procesos del dolor y la forma de cómo trabajarlo. Las personas que asisten no son personas que hayan perdido un ser querido recientemente, sino que llevan un duelo de 2 a 3 años, estas son las personas que llegan hasta esta agrupación. Igualmente han llegado papás que recién han perdido a un ser querido, a ellos los asistimos en su domicilio.”
-¿Cómo logras en forma personal llevar el peso y el dolor de muchos papás que sufren una pérdida así?
Yo aparte de perder a mi hijo, he tenido situaciones muy dolorosas y fuertes en mi vida, pero a pesar de eso, tengo algo y es que soy muy positivo. Esto me ha ayudado a superar la pérdida de mi hija, que tenía 11 años y que falleció el año 1997. Posteriormente yo me he incorporado a otras actividades pastorales en la parroquia San José, también soy agente pastoral de la salud y tengo un grupo interno.
-¿Qué nuevas etapas y desafíos tiene esta agrupación?
Este es un grupo que está ajeno a la política, religión y condición social. Nuestras labor es acoger a los papás sin discriminación de ninguna clase y en cuanto a la otra pregunta, nosotros este año queremos tener una personalidad jurídica que nos permita crecer como institución y de esta manera dar más apoyo a los papas y a abrirse a otros personas que han sufrido la pérdida de algún ser querido y no solamente de un hijo.También este año queremos apoyar más fuertemente a los papás que recién han sufrido una pérdida, como ser tíos o primos por ejemplo. A ellos le daremos cabida este año.”
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